Cómo conectar con las emociones de nuestros hijos
/"Está comprobado científicamente que la fuerza más grande para la salud física y mental de un adolescente es una buena relación con sus padres".
Recordé esta frase de la Dra. Lisa Damour, especialista en adolescentes y asesora de Inside Out 2, mientras salía de ver esta extraordinaria película con mi familia. Todavía no puedo creer que tuve la gran fortuna de conocer a la doctora y aprender muchísimo de ella en el Summit de Responsibility.org en Washington, DC hace algunos meses.
Les cuento que Pixar invitó a la Dra. Lisa Damour como asesora de la película para mostrar las emociones de Riley, la protagonista de la historia, de la manera más realista posible gracias a la gran experiencia que tiene Lisa con adolescentes. Después de platicar con ella en el Summit y ver la película, confirmo una vez más que hay que tirar a la basura todos los estereotipos que tenemos de la adolescencia y de cómo supuestamente debemos tratar a nuestros hijos durante estos años.
Ideas como darles su espacio y pensar que resolverán sus problemas con amigos son conceptos obsoletos. Tenemos que recordar que somos la principal influencia en ellos y durante estos años debemos estar más cerca de ellos que nunca. Pero ¿por qué dudamos tanto de nosotros mismos como padres? y ¿cómo logramos realmente conectar con ellos?
El verano es el momento perfecto para reconectar con nuestros hijos y es por eso que hoy les comparto estos extraordinarios consejos que nos dio la Dra. Damour para lograrlo:
La salud mental no se trata de sentirnos bien, sino de experimentar las emociones de acuerdo con lo que está sucediendo. No se trata de reprimirlas, sino de aprender a manejarlas.
La música es una herramienta buenísima para conectar con nuestros hijos y enseñarles a procesar las emociones a través de canciones. Pídanle a sus hijos que compartan con ustedes el playlist que escuchan cuando están tristes o emocionados; esto les permitirá entender cómo manejan y procesan sus emociones a través de la música.
La mejor manera de mantenerlos a salvo es mantenerlos cerca.
No piensen en tener solo una conversación "importante". Más bien, tengan conversaciones cortas y con más frecuencia.
Traten de no sobre reaccionar cuando les cuenten algo riesgoso que hicieron sus amigos. Esto automáticamente los alejará. En lugar de juzgar, pregúntenles qué piensan ellos de ese comportamiento.
Explíquenles el concepto de razonamiento en "frío" y en "caliente". Es importante que entiendan que no es lo mismo razonar cómo reaccionarían en una situación riesgosa en la comodidad de la sala de su casa, platicando con nosotros, que cuando tienen que razonar durante la situación riesgosa y cargada de emociones. Denles a sus hijos una salida rápida y fácil cuando estén en esas situaciones riesgosas, como culpar a sus papás para tener la excusa de salir.
Su seguridad es primero. Platiquen con sus hijos que lo más importante para nosotros es que estén a salvo. Es mucho más importante que no se lastimen a que no los cachen y escondan sus acciones.
En lugar de darles un sermón largo que solo los aleje, mejor pregúntenles qué les está impidiendo tomar buenas decisiones. Eso los hará reflexionar.
Salgan a la naturaleza o a realicen alguna actividad física con ellos.
Estos meses de verano son ideales para reconectar y tener muchas de esas conversaciones cortas y constantes. No pierdan esa oportunidad y recuerden como dice la Dra. Lisa, si un adolescente tiene en su vida al menos un adulto en quien confíe se encontrará mucho más seguro durante esta etapa crítica de sus vidas.
Mil gracias a la Dra. Lisa Damour por compartir con nosotros estos consejos y a Responsibility.org por ser siempre un apoyo para tener estas conversaciones con nuestros hijos para toda la vida.
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